Objetivo General
· -
Recordar la anatomía y
fisiología, necesarias para poder conocer y realizar la valoración del Sistema
Endocrino y así enriquecer nuestros conocimientos.
Objetivos Específicos
· -
Recolectar información
sobre la anatomía, fisiología y valoración del Sistema Endocrino.
·
-Conocer las distintas
glándulas y las hormonas que secreta el sistema endocrino.
·
-Descubrir la capacidad
del organismo para regular los niveles de hormona.
·
-Analizar los diferentes
aspectos que hay dentro de la valoración del sistema endocrino.
·
-Dar a conocer la
información en el aula de clase para socializarla con los compañeros.
INTRODUCCIÓN
El sistema Endocrino junto al
Sistema Nervioso constituyen los dos principales sistemas de comunicación y
control del organismo en toda su extensión. El sistema endocrino se ocupa
fundamentalmente de los mediadores químicos (hormonas) los cuales secreta a la
circulación sanguínea para que estos cumplan en su órgano o célula diana una
determinada función metabólica para cual fue liberada.
Los efectos del sistema tienen la
particularidad de producirse en segundos en algunos casos o tomar días, incluso
semanas en otros.
Las numerosas interrelaciones en su mismo sistema, con el sistema
nervioso e inmune lo hacen complejo, cualidad necesaria para llevar a cabo su
papel de “gran regulador”
Las funciones de crecimiento, regulación de excreción de agua,
regulación de la temperatura corporal, de control de la acción y respuesta
inmediata tanto física y mental de una persona, las funciones sexuales y de
reproducción de los seres humanos y muchas otras están regidas por las
glándulas endocrinas que a su vez están bajo la acción de la hipófisis y
previamente, del hipotálamo. Pero todas estas funciones pueden verse afectadas
por algún desequilibrio tanto hormonal como glandular, originando serias patologías
que pueden ser hasta irreversibles.
Algunas de estas patologías son: enanismo, gigantismo, Síndrome de
Cushing, enfermedad de Addison, virilismo, diabetes, hipertiroidismo,
hipotiroidismo y muchas otras que alteran nuestro funcionamiento general como
gran sistema.
Examen Físico Se la define como la exploración metódica y personalizada
(semiotecnia) que realiza el profesional de salud sobre el paciente con el fin
de reconocer en el paciente elementos que orientan al Diagnóstico. El examen
físico exhaustivo nos permitirá determinar anomalías referentes al sistema en
endocrino utilizando las técnicas de exploración, como son las observación,
palpación percusión y auscultación.
ANATOMÍA Y FISIOLOGÍA DEL
SISTEMA ENDOCRINO Y METABÓLICO
El sistema
endocrino está formado por una serie de glándulas, las hormonas que vierten sus
productos de secreción en los espacios
extracelulares, donde son recogidos por la sangre y llevadas a otras regiones
del organismo. De esta forma, se realiza un control de los procesos
fisiológicos del cuerpo humano. (C.
Guillamas)
Glándulas
Son órganos del
cuerpo productores de secreciones o sustancias que cumplen funciones específicas.
Los procesos más importantes del cuerpo se realizan gracias a las secreciones
de las glándulas. (Villaquiran, 2008)
En nuestro
organismo existen diferentes tipos de glándulas y se clasifican en:
Ø Glándulas
de secreción interna o endocrina.
Ø Glándulas
de secreción externa o exocrina.
Ø Glándulas
de secreción mixta. (Villaquiran, 2008)
Glándulas de secreción interna o endocrinas:
son aquellas que carecen de conductor excretor por lo que vierten sus productos
directamente en la sangre (ej: tiroides, suprarrenales). (Villaquiran,
2008)
Glándulas de secreción externa o exocrina:
poseen canalículos o tubos por donde liberan sus secreciones sobre la
superficie interna o externa de los tejidos cutáneos, la mucosa del estómago o
el revestimiento de los conductos pancreáticos. La secreción puede ser mucosa o
serosa. Al grupo de glándulas de secreción externa pertenecen el hígado que
produce bilis, el estómago que produce ácido clorhídrico y pepsina para la
digestión, las mamas que segregan leche, las glándulas salivales que producen
la saliva que humedece la boca y contiene sustancias digestivas. (Villaquiran,
2008)
Glándulas de secreción mixta:
son las que producen las dos clases de secreción, como el páncreas que produce
la tripsina que intervine en la digestión y la insulina que regula el consumo
de azúcar. (Villaquiran, 2008)
Son glándulas
endocrinas entre otras:
Ø La
hipófisis
Ø Tiroides
Ø Paratiroides
Ø Las
glándulas suprarrenales
Ø Pineal
Ø Timo
Ø Páncreas
Ø Las
gónadas (C.
Guillamas)
Tratar con la
anatomía y el funcionamiento de dichas glándulas nos permitirá conocer cómo se
realiza el equilibrio u homeostasis de nuestro organismo. (C. Guillamas)
Hipófisis
También se
denomina glándula pituitaria. Es un pequeño órgano en forma de un riñón, de
color rojizo grisáceo. Se encuentra localizado en la silla turca del esfenoides
y se une al encéfalo mediante el tallo
pituitario o hipofisario. Su peso es de 0.5 a 1 gramo. (Villaquiran,
2008)
Se puede dividir
en dos porciones distintas: hipófisis anterior o adenohipófisis, e hipófisis
posterior o neurohipófisis. Entre las dos porciones existe una zona pequeña
denominada pars intermedia o porción intermedia. (Villaquiran,
2008)
Vascularización:
está muy vascularizada a partir de la arteria hipotalámica y las arterias
hipofisarias superior e inferior. (Villaquiran, 2008)
Glándulas
tiroides
Es un órgano
impar, situada en la cara anterior del cuello, en la unión de su tercio
inferior con sus dos tercios superiores. Tiene una coloración entre castaño y
rojizo, su peso en un adulto es de 20 a 30 gramos, tiene forma de un anillo,
cuya concavidad está dirigida hacia atrás y abraza la tráquea. Se considera en
ella un istmo y dos lóbulos laterales. (Villaquiran, 2008)
La superficie
externa es convexa y está cubierta por la piel y los músculos
esternocleidomastoideo, omohioideo, esternohioideo, y esternotirohioideo. Las fascia
profunda constituyen una cápsula que envuelve la glándula, es de mayor tamaño
en los hombres que en las mujeres y tiene la particularidad que crece durante
el embarazo. (Villaquiran, 2008)
Vascularización:
esta profusamente vascularizada por las arterias tiroideas superiores e
inferiores. (Villaquiran, 2008)
Glándula
paratiroides
Son cuatro glándulas
paratiroides unidas a las superficies dorsales de los lóbulos laterales de la
glándula tiroides, tiene un aspecto de un disco oval de grasa color
pardo-amarillo. El peso combinado de las cuatro glándulas es de 560 mg como
máximo. (Villaquiran, 2008)
Se distinguen en
dos glándulas superiores y dos glándulas inferiores. (Villaquiran,
2008)
Vascularización:
están muy vascularizadas por dos arterias paratiroideas superiores y las dos
arterias paratiroideas inferiores. (Villaquiran, 2008)
Glándula
suprarrenal
Son dos órganos
voluminosos, situados simétricamente en la parte superior del abdomen, encima
de los polos superiores de cada riñón. Son de color oscuro amarillento y su
consistencia es bastante blanda, pesa de 4 a 7 gramos. Cada glándula consta de
dos partes con funciones independientes: la corteza o externa o la médula o
interna. (Villaquiran, 2008)
Vascularización:
están irrigadas por tres arterias suprarrenales: superior, media, e inferior. (Villaquiran,
2008)
Glándula
pineal
Es una proyección
de forma cónica situada en el techo diencefálico del extremo posterior del
tercer ventrículo. Pesa unos 120 mg, la glándula se encuentra cubierta por
piamadre, que forma una cápsula desde la cual se extienden unos tabiques que la
dividen en lobulillos incompletos. (Villaquiran, 2008)
Produce
melatonina, que es la única hormona secretada en la corriente sanguínea por
esta glándula. Su ritmo diurno es muy marcado, de forma que los niveles
sanguíneos son varias veces superiores por la noche que durante el día. Esta hormona
parece inhibir numerosas funciones endocrinas, como las de las hormonas
gonadotropas, y disminuye la pigmentación de la piel. (Villaquiran,
2008)
Timo
Al timo
antiguamente se lo consideraba también como una glándula endocrina, ahora se
sabe que es órgano central del sistema linfático. Su secreción es la timosina,
hormona compuesta por péptidos de importancia para la maduración y desarrollo
del sistema inmunitario. (Villaquiran, 2008)
Está situado en el
mediastino anterior, entre los dos pulmones, detrás del esternón, delante del
corazón y de los grandes vasos, su color
es rosado en el feto y grisáceo en el niño. (Villaquiran, 2008)
El timo aumenta su
peso en los dos primeros años de vida, y desde entonces a la pubertad, crece en
lentitud hasta alcanzar unos 30 gramos de peso. Después involuciona de forma
gradual y su tejido es reemplazado por grasa. (Villaquiran,
2008)
Páncreas
Se la denomina
glándula salival del abdomen, se extiende desde la concavidad del duodeno hasta
el bazo, pesa 85 gramos y su cabeza se localiza en la concavidad del duodeno. (Villaquiran,
2008)
El páncreas es una
glándula de secreción mixta, su secreción exocrina es liberar enzimas en el
intestino para ayudar a la digestión. Su secreción endocrina es la insulina, se
produce en los islotes pancreáticos (islotes de Langerhans) y el glucagón. (Villaquiran,
2008)
Gónadas
Las glándulas
sexuales masculinas son los testículos, mientras que las femeninas son los
ovarios unas y otras producen respectivamente la testosterona en el varón y los
estrógenos y progesterona en la mujer. (Villaquiran, 2008)
Las
Hormonas
Las hormonas son
activas en cantidades pequeñas, existiendo mecanismos de control para su
producción y liberación a la sangre. (C. Guillamas)
Una hormona es una
sustancia química que presenta las siguientes características:
Ø Es
sintetizada por una célula
Ø Es
eficaz en cantidades pequeñas
Ø Se
secretan al torrente circulatorio
Ø Actúa
sobre un órgano blanco o diana
Ø Es
un regulador fisiológico que aumenta o disminuye la velocidad de una función (C. Guillamas)
El mecanismo de
acción de una hormona depende de su naturaleza química y se clasifican en:
Ø Proteínas
y polipéptidos: insulina, glucagón y hormona folículo estimulante (FSH)
Ø Derivadas
de aminoácido: tiroxina y adrenalina
Ø Derivadas
de esteroides y ácidos grasos: progesterona, estradiol, y testosterona. (Villaquiran, 2008)
FISIOLOGÍA
Las funciones del
organismo están reguladas por dos sistemas: el sistema nervioso y el sistema
endocrino u hormonal. (Villaquiran, 2008)
El sistema
endocrino está relacionado principalmente con el control de las diferentes
funciones metabólicas del organismo, como las reacciones químicas en las
células y el transporte de sustancias a través de las membranas celulares u
otros aspectos del metabolismo celular, tales como el crecimiento y la
secreción. Algunos efectos hormonales se producen en segundos, mientras que
otros requieren varios días y pueden continuar durante semanas o meses. (Villaquiran,
2008)
Existen numerosas
interrelaciones entre los sistemas hormonal y nervioso. Al menos dos glándulas
secretan sus hormonas casi enteramente en respuesta a estímulos nerviosos: La
médula suprarrenal y la hipófisis. A su vez, las hormonas hipofisarias
controlan la secreción de la mayor parte de las glándulas endocrinas. (Villaquiran, 2008)
Naturaleza de las
hormonas:
Una hormona es una
sustancia química secretada en los líquidos corporales internos por una célula
o un grupo de células y que ejerce un efecto de control fisiológico de otras
células del organismo. (Villaquiran, 2008)
Mecanismo de acción
hormonal
La hormona afecta
la función del receptor de su célula diana lo que es la causa directa de los
efectos fisiológicos como:
·
Cambio de permeabilidad
de la membrana
·
Activación de una enzima
intracelular
·
Activación de genes,
especialmente las hormonas esteroideas y tiroideas. (Villaquiran,
2008)
Hormonas que actúan sobre el mecanismo genético:
consiste principalmente en provocar la síntesis de proteínas en las células
diana; estas proteínas actúan posteriormente como enzimas, proteínas de
transporte, o proteínas estructurales que a su vez realizan otras funciones en
las células. (Villaquiran, 2008)
Hormonas de la hipófisis anterior o adenohipófisis: Las
hormonas de la adenohipófisis desempeñan papeles fundamentales en el control de
las funciones metabólicas. (Villaquiran, 2008)
La adenohipófisis
contiene numerosos tipos de células secretoras; por lo general existe un tipo
celular por cada hormona principal formada en la glándula. (Villaquiran,
2008)
Mediante tinciones
especiales de anticuerpos de gran afinidad que se unen a las distintas
hormonas, es posible diferenciar al menos cinco tipos de células, tal como sigue:
Somatotropas:
Hormona del crecimiento humano (HGH)
Corticotropas:
Adrenocorticotropina (ACTH)
Tirotropas: (TSH)
Gonadotropas:
Hormonas gonadotrópicas, que comprenden tanto la hormona luteinizante (LH) como
la hormona foliculoestimulante (FSG)
Lactotropas:
Prolactina (PRL). (Villaquiran, 2008)
Función de las hormonas liberadas e inhibidoras:
consiste en controlar la secreción de las hormonas de la hipófisis anterior.
Para la mayor parte de las hormonas de la hipófisis anterior, lo importante son
las hormonas liberadoras aunque, en el caso de la prolactina, probablemente
ejerza más control una hormona inhibidora. Las principales hormonas liberadoras
e inhibidoras hipotalámicas son las siguientes: (Villaquiran,
2008)
·
Hormona liberadora de
tirotropina (TRH), que produce la liberación de tirotropina.
·
Hormona liberadora de
corticotropina (CKF), que produce la liberación de Adrenocorticotropina.
·
Hormona liberadora de la
hormona del crecimiento (GHRH), y hormona inhibidora de la hormona del
crecimiento (GI), o somatostatina.
·
Hormona liberadora de
gonadotropinas (GnRH), que produce liberación de las dos hormonas Gonadotropas,
hormona luteinizante y hormona folículo-estimulante.
·
Hormona inhibidora de la
prolactina (PIH). (Villaquiran, 2008)
Hormona del crecimiento:
Estimula el
crecimiento de todo el organismo al actuar sobre la formación de proteínas, la multiplicación
celular y diferenciación celular. Produce el crecimiento de casi todos los
tejidos del organismo capaces de crecer. (Villaquiran, 2008)
Estimula el
aumento de tamaño de las células y el aumento de las mitosis, con desarrollo de
un mayor número de células y diferenciación especifica de ciertos tipos
celulares, tales como las células de crecimiento óseo y las células musculares
primitivas. (Villaquiran, 2008)
Adrenocorticoticotropina (corticotropina):
Controla la
secreción de algunas de las hormonas de la corteza suprarrenal, lo que a su vez
afecta al metabolismo de glucosa, proteínas y grasas. (Villaquiran,
2008)
Tirotropina (tirotropa)
Controla la
secreción de tiroxina y triyodotironina por la glándula tiroides, y estas
hormonas controlan a su vez la velocidad de la mayor parte de las reacciones químicas
intracelulares de todo el organismo. (Villaquiran, 2008)
Prolactina:
Estimula el
desarrollo de la glándula mamaria y la producción de leche. Y dos hormonas
gonadotrópicas diferentes. (Villaquiran, 2008)
Hormona folículo-estimulante, y luteinizante:
Controla el
crecimiento de las gónadas, así como sus actividades hormonales y
reproductoras. (Villaquiran, 2008)
Hormonas de la hipófisis posterior (neurohipófisis)
La neurohipófisis está
compuesta principalmente por células de tipo gHal denominadas pituicitos, que
no secretan hormonas, sino que actúan como estructuras de soporte para un gran número
de terminaciones nerviosas de haces nerviosos que se originan en los núcleos
supraópticos y paraventricular del hipotálamo, estos haces pasan a la
neurohipófisis a través de tallo hipofisario. (Villaquiran, 2008)
Las terminaciones
nerviosas son botones bulbosos que contienen gránulos secretores situados sobra
la superficie de los capilares, a los que secretan las dos hormonas de la
neurohipófisis, la hormona antidiurética (ADH) y la oxitocina. (Villaquiran,
2008)
Las dos hormonas
desempeñan papeles diferentes:
Hormona antidiurética
También denominada
vasopresina: controla la tasas de excreción de agua por la orina y de este modo
ayuda a controlar la concentración de agua en los tejidos corporales. (Villaquiran,
2008)
Oxitocina
Tiene dos efectos:
sobre la emisión de leche: en la lactina, produce la expresión de la leche
desde los alveolos hasta los conductos, de modo que el recién nacido la obtenga
al mamar. (Villaquiran, 2008)
Sobre el útero y
sobre el nacimiento: la oxitocina, estimula poderosamente la contracción del útero
grávido; por tanto, numerosos obstetras creen que esta hormona es al menos parciamente
responsable de la realización del parto. (Villaquiran, 2008)
Corteza suprarrenal
De la corteza
suprarrenal se ha aislado más de 300 esteroides, pero tan solo dos poseen una
importancia excepcional para la función endocrina normal del organismo humano:
la aldosterona, que es el principal mineralcorticoide, y el cortisol que es el
principal glucocorticoide. (Villaquiran, 2008)
Aldosterona:
Es una hormona
esteroidea que interviene en la regulación de los niveles sanguíneos de sodio y
potasio. (Villaquiran, 2008)
Cortisol (hidrocortisona):
Es una hormona esteroidea producida de forma natural en el organismo; se la puede sintetizar artificialmente para usarla como medicamento antiinflamatorio. (Villaquiran, 2008)
Es una hormona esteroidea producida de forma natural en el organismo; se la puede sintetizar artificialmente para usarla como medicamento antiinflamatorio. (Villaquiran, 2008)
Efectos del
cortisol:
·
Estimula la formación de
hidratos de carbono a partir de las proteínas y algunas otras sustancias en el
hígado.
·
Reduce los depósitos de
proteínas en casi todas las células corporales a excepción de las hepáticas.
·
Promueve la movilización
de ácidos grasos del tejido adiposo.
·
Bloquea la respuesta
inflamatoria a las reacciones alérgicas, reduce el número de eosinófilos y de
linfocitos en la sangre, disminuye el nivel de inmunidad para casi todos los
invasores extraños del organismo, aumenta la producción de eritrocitos.
Glándula tiroides
La glándula
tiroides secreta dos hormonas importantes, la tiroxina y la triyodotironina,
las cuales producen un profundo aumento del metabolismo del organismo. También
secreta calcitonina, una hormona importante para el metabolismo del calcio.
La secreción
tiroidea está controlada principalmente por la tirotropina (TSH), secreta por
la hipófisis anterior. (Villaquiran, 2008)
Funciones de las hormonas tiroides en los tejidos:
el efecto general de la hormona tiroidea consiste en producir la transcripción
nuclear de gran número de genes.
Sobre la actividad metabólica celular: aumentan las
actividades metabólicas de todos o casi todos los
tejidos corporales, el metabolismo basal puede aumentar hasta un 60 – 100% por encima
de lo normal cuando se secretan grandes cantidades de la hormona.
Sobre el crecimiento: la
hormona tiroidea posee efectos tanto generales como específicos sobre el
crecimiento. Se manifiesta principalmente, en el niño en crecimiento. En los
niños hipotiroideos, el crecimiento está muy retrasado.
En los
hipertiroideos, a menudo se produce un crecimiento esquelético excesivo.
Sobre el crecimiento y el desarrollo del cerebro
durante la vida fetal y en los primeros años de la vida postnatal:
si el feto no secreta suficiente cantidad de hormona tiroidea, el crecimiento y
la maduración del cerebro se ven muy retrasados, tanto antes como después del
nacimiento, y el cerebro será más pequeño de lo normal.
Páncreas endocrino:
El páncreas
endocrino está compuesto por dos tipos principales de tejidos, los acinos, que
secretan jugos digestivos al duodeno, y los islotes pancreáticos (de
langherans), que secretan insulina y glucagón directamente a la sangre. Las
células delta de los islotes pancreáticos secretan la hormona somatostatina. (Villaquiran,
2008)
Somatostatina:
Casi todos los
factores relacionados con la ingestión de alimentos estimulan la secreción de
somatostatina, entre ellos se incluyen:
·
Aumento de glucemia.
·
Aumento de aminoácidos
·
Aumentos de ácidos grasos
·
Amento de las
concentraciones elevadas de varias de las hormonas gastrointestinales liberadas
por el tubo digestivo en respuesta a la toma de alimentos. (Villaquiran,
2008)
Insulina:
Metabolismo:
Históricamente la
insulina se ha relacionado con el azúcar de la sangre, y es cierto que la
insulina ejerce poderosos afectos sobre el metabolismo de las grasas y las
proteínas, tanto como el metabolismo de los carbohidratos. (Villaquiran,
2008)
Efectos sobre el metabolismo:
Sobre el metabolismo de los hidratos de carbono:
Inmediatamente
después de una comida rica en carbohidratos, la glucosa absorbida a la sangre
provoca una rápida secreción de insulina. (Villaquiran, 2008)
La insulina a su
vez causa una rápida captación, almacenamiento y utilización de la glucosa por
casi todos los tejidos del cuerpo pero especialmente por los músculos, el
tejido adiposo y el hígado. (Villaquiran, 2008)
Almacenamiento de
glucógeno en los músculos: si los músculos no se están ejercitando tras una
comida y, sin embargo, se está transportando abundante glucosa al interior de
la célula muscular, se acumula hasta un límite de concentración del 2 al 3%, en
vez de ser utilizada para obtener energía, el glucógeno puede ser empleado más
tarde como fuente de energía en el músculo. (Villaquiran, 2008)
En el almacenamiento y la utilización de glucosa por
el hígado: uno de los efectos más importantes de la
insulina es hacer que la mayor parte de la glucosa absorbida tras una comida
sea almacenada de forma casi inmediatamente en el hígado en forma de glucógeno. (Villaquiran,
2008)
Sobre la síntesis y almacenamiento de las proteínas:
durante unas pocas horas tras una comida, cuando están disponibles en la sangre
circulante excedentes de nutrientes, no solo se almacenan en los tejidos
hidratos de carbono y grasas, sino también proteínas; la insulina es necesaria
para que esto ocurra. (Villaquiran, 2008)
Sobre el crecimiento:
Dado que la insulina es necesaria para la síntesis de proteínas, es tan
necesaria para el crecimiento como la hormona del crecimiento. (Villaquiran, 2008)
Glucagón
El glucagón, es
una hormona secretada por las células alfa de los islotes pancreáticos. Su
secreción es estimulada por la hipoglucemia y por la hormona de crecimiento de
la hipófisis anterior. (Villaquiran, 2008)
Regulación de la secreción de glucagón:
la elevación de la glucemia es el factor más potente de regulación de la
secreción de glucagón.
Glándulas paratiroides
En los seres
humanos jóvenes se cree que las células principales de las glándulas
paratiroides secretan la mayoría de la hormona parathormona. (Villaquiran,
2008)
Parathormona
Mantiene una
concentración constante de calcio en el líquido extracelular. Su función es
regular la absorción de calcio desde el tracto gastrointestinal, la
movilización y deposito del calcio en los huesos y la eliminación del calcio a
través de la leche materna, heces, sudor, y orina. (Villaquiran, 2008)
Testículos
Estimula el
crecimiento de los órganos sexuales masculinos y favorece el desarrollo de los
caracteres sexuales secundarios (Villaquiran, 2008)
Ovarios:
Estrógenos
Estimula el
desarrollo de los caracteres sexuales femeninos, las mamas y los caracteres
sexuales secundarios. (Villaquiran, 2008)
Progesterona:
Estimula la
secreción del endometrio y ayuda al desarrollo del aparato secretor de las
mamas. (Villaquiran, 2008)
Placenta:
Gonadotropina coriónica humana:
Favorece el
crecimiento del cuerpo lúteo y la secreción de estrógenos y progesterona.
Estrógenos
Favorece el
crecimiento de los órganos sexuales de la madre y de algunos tejidos del feto.
Progesterona
Promueve el
desarrollo del endometrio para la implantación del huevo fecundado. Favorece el
desarrollo de algunos órganos fetales, ayuda al desarrollo del aparato secretor
mamario.
Somatomamotropina humana:
Favorece el
desarrollo de algunos tejidos fetales y el desarrollo de las glándulas mamarias. (Villaquiran,
2008)
EXAMEN FÍSICO DEL SISTEMA
ENDOCRINO
Valoración
Antecedentes de salud
Los trastornos
endocrinos específicos se acompañan a manudo de síntomas clínicos, también
específicos, pueden presentarse además manifestaciones más generales. Algunos
signos y síntomas comunes de desequilibrio endocrinos incluyen cambios
energéticos, tolerancia al calor o frio, peso y distribución de grasa y líquidos,
características sexuales secundarias, disfunción sexual, memoria, concentración, patrones de sueño y
talente. (Suddarth's & Brunner, 2013,
pág. 1248)
El interrogatorio de salud debe incluir
información acerca de: (Suddarth's & Brunner, 2013,
pág. 1248)
v La
intensidad de estos cambios
v El
tiempo durante el que el paciente experimenta los cambios
v La
forma en que estos cambios afectan la capacidad del paciente para realizar
actividades de la vida diaria
v El
efecto de los cambios sobre la autopercepción del paciente. (Suddarth's
& Brunner, 2013, pág. 1248)
Los síntomas
específicos de varios trastornos endocrinos se analizan con cada uno de ellos.
Aspectos a
valorar relacionados con la genética
Antecedentes familiares
v En
cuanto a pacientes con enfermedades hepáticas, pancreática o endocrina de
inicio temprano.
v Averiguar
datos de miembros de la familia con diabetes y sus edades de inicio.
v Antecedentes
familiares de otros trastornos genéticos relacionados, como fibrosis quística,
deficiencia de antitripsina y hemocromatosis hereditaria. (Suddarth's
& Brunner, 2013, pág. 1248)
Exploración física
La exploración
física debe incluir:
v signos
vitales
v una
revisión visual de cabeza a pies y la exploración táctil.
v Los datos obtenidos se comparan con los
previos, cuando están disponibles.
v Los cambios de las características físicas,
como el aspecto del vello facial en las mujeres, edema, el adelgazamiento de la piel, la obesidad del tronco, el
adelgazamiento de las extremidades, el aumento de tamaño de los pies y manos y
el edema, pueden señalar trastornos de tiroides, corteza suprarrenal o
hipófisis.
v El
exoftalmos y otros síntomas oculares pueden presentarse en el hipertiroidismo.
v La
alteración de la textura cutánea se vincula con la hipofunción e hiperfunción
de la glándula tiroides.
v Es
posible la elevación de la presión arterial con la hipofunción de la corteza
suprarrenal.
v Los cambios conductuales, como agitación,
nerviosismo, talante deprimido, o la falta de preocupación acerca del aspecto
personal, pueden estar presentes. (Suddarth's & Brunner, 2013,
pág. 1249)
Inspección General
Es fundamental recoger determinados
parámetros que nos ayudarán a una correcta interpretación diagnóstica. Entre
ellos destacamos:
Talla. Es fundamental para el diagnóstico y
control de los retrasos de crecimiento, y para valorar las alteraciones del
área gonadal en el período de desarrollo. (Castro, s.f.)
Peso. Junto con el anterior, permite el
diagnóstico de obesidad y delgadez y es un parámetro importante para el control
de pacientes obesos, diabéticos y con alteraciones en el eje hipofisario. (Castro, s.f.)
Pulso. Es importante para valorar patologías
que cursan con alteraciones del ritmo y de la frecuencia como las arritmias del
hipertiroidismo o la bradicardia del hipotiroidismo. (Castro, s.f.)
Tensión arterial. Suele correlacionarse con
diferentes entidades que cursan con hipo o hipertensión (patología suprarrenal
e hipofisaria). (Castro, s.f.)
Temperatura. En determinadas enfermedades
hipofisarias y tiroideas se aprecian desajustes de la temperatura corporal. La
hipotermia es constante en el coma mixedematoso, y habitual en los
hipotiroidismos. Suele coexistir, al contrario, elevaciones térmicas en las
crisis tirotóxicas y tiroiditis. (Castro, s.f.)
Es fundamental estructurar aquellos
aspectos de la exploración general que suelen ofrecer más información de las
diversas endocrinopatías. (Castro, s.f.)
Estado nutritivo
Valoraremos el estado nutricional del
individuo mediante gráficas de talla y peso. Puede ser muy deficiente en el
hipertiroidismo, la diabetes mellitus, la anorexia nerviosa y en todas aquellas
patologías que cursan con importantes pérdidas de peso. (Castro, s.f.)
Piel y faneras
Debemos valorar especialmente el
color de la piel, la presencia de estrías, el aspecto, la presencia de
hemorragias, la disminución o el aumento del vello corporal, el hirsutismo y
otros signos de virilización. (Castro, s.f.)
Color
Destaca la palidez de la piel y de la
aréola mamaria secundaria al déficit de hormona adrenocorticotrópica (ACTH).
Así mismo, destaca la palidez amarillenta del hipotiroidismo y la presencia de
vitíligo asociado a la enfermedad de Graves-Basedow y a la tiroiditis de
Hashimoto. (Castro, s.f.)
La hiperpigmentación de la piel debe
buscarse en áreas específicas, tales como las aréolas mamarias, pliegues
cutáneos y órganos genitales, y debe orientar hacia trastornos endocrinos que
cursan con exceso de ACTH y/o MSH (enfermedad de Addison, síndrome de Nelson o
síndromes paraneoplásicos). (Castro, s.f.)
La presencia de estrías rojovinosas
en región axilar, abdomen, flancos y muslos, y de equimosis, púrpura y
hemorragias, fundamentalmente en extremidades inferiores, debe orientarnos
hacia un síndrome de Cushing, aunque sin olvidar que esas estrías rojovinosas
pueden aparecer en la obesidad. (Castro, s.f.)
El aspecto de la piel debe explorarse
siempre, ya que en el hipertiroidismo puede volverse fina, mientras que en el
hipotiroidismo y en el hipoparatiroidismo puede aparecer seca y escamosa. (Castro, s.f.)
La disminución o ausencia del vello
corporal en el varón nos orienta hacia un hipogonadismo, mientras que en la
mujer la pérdida del vello axilar y pubiano sugiere un déficit de ACTH
(síndrome de Simmonds-Sheehan). (Castro, s.f.)
Las uñas pueden volverse quebradizas,
blandas y friables en el hipertiroidismo e hipoparatiroidismo o adquirir
pigmentaciones como en la enfermedad de Addison. En los enfermos diabéticos
puede aparecer
con cierta frecuencia onicomicosis. (Castro, s.f.)
Signos de androgenización
En la mujer hay que valorar la
presencia de hirsutismo y de otros signos de androgenización como el acné,
tendencia a la calvicie de tipo masculino e hipertrofia del clítoris. (Castro, s.f.)
Tono de la voz
En algunos trastornos endocrinos el
tono de la voz adquiere algunas características típicas. Así, en el varón
afectado de hipogonadismo, la voz puede volverse fina y
atiplada. En los enfermos de ambos sexos que sufren hipotiroidismo, la voz se torna áspera y ronca. En la mujer este cambio puede deberse también a un hiperandrogenismo. (Castro, s.f.)
atiplada. En los enfermos de ambos sexos que sufren hipotiroidismo, la voz se torna áspera y ronca. En la mujer este cambio puede deberse también a un hiperandrogenismo. (Castro, s.f.)
Estado emocional
Debemos tener en cuenta los cambios
del comportamiento, el equilibrio emocional y la forma de comportamiento que se
asocian a patologías endocrinológicas. (Castro, s.f.)
En el hipertiroidismo, por ejemplo,
encontramos inquietud, nerviosismo, labilidad psíquica y hasta reacciones
psicóticas. Al contrario, los pacientes hipotiroideos suelen mostrarse lentos,
indiferentes y depresivos. (Castro, s.f.)
Existen numerosas alteraciones del
sistema endocrino asociados a cuadros depresivos y confusionales como en la
patología del eje suprarrenal, en el síndrome de Simmonds-Sheehan o en la
encefalopatía hipercalcémica. (Castro, s.f.)
Región Cefálica
A continuación pasamos a describir el
aspecto de la facies y del cabello cuyos datos exploratorios aportan
información hacia la presencia de un trastorno endocrino.
Facies
Diversas enfermedades pueden
diagnosticarse casi únicamente a través de esta valoración. Así, una facies
inexpresiva, abotargada, con caída de las pestañas y depilación del tercio
externo de las cejas sugiere hipotiroidismo. Al contrario, una facies con
mirada viva y brillante, retracción palpebral y exoftalmos sugiere una
enfermedad de Graves-Basedow.
Es característico del hipogonadismo
en los varones, una facies con edad aparente superior a la real y con pérdida
de vello.
Una facies con rasgos muy
prominentes, es decir, prognatismo y nariz grande, puede corresponder a una
acromegalia. En el síndrome de Cushing, suele presentarse una cara rojiza y de
luna llena. Si existe una hipersecreción de ACTH y/o MSH el aspecto del
paciente será el de una facies hiperpigmentada.
El examen de la boca abarcará la
exploración de las encías y de las mucosas, que pueden presentar pigmentaciones
sugestivas de enfermedad de Addison. Debemos observar el aspecto de la lengua,
agrandado en la acromegalia, hipotiroidismo y en las amiloidosis; las micosis
linguales, asociadas al hipoparatiroidismo primario, enfermedad de Addison y a la
candidiasis mucocutánea crónica. (Castro, s.f.)
En la exploración ocular podemos
observar exoftalmos y retracción palpebral sugestivos de la enfermedad de
Graves-Basedow. Debemos valorar la agudeza visual, la campimetría y el fondo de
ojo, que pueden estar alterados en la retinopatía diabética y en la patología
hipofisaria tumoral. (Castro, s.f.)
Folículos pilosos
Es útil valorar el aspecto del
cabello, áspero, seco y con tendencia a la caída en el hipotiroidismo. Al
contrario, suele ser fino y frágil en el hipertiroidismo. (Castro, s.f.)
Debemos, también, tener en cuenta su
distribución. Una calvicie de tipo masculino en la mujer sugiere
androgenización. (Castro, s.f.)
Región Cervical
Es de gran importancia, sobre todo en
el estudio de la patología tiroidea. La exploración física del tiroides comprende
la inspección, la palpación y la auscultación. (Castro, s.f.)
Inspección
En primer lugar, debemos observar la
existencia de cicatrices operatorias o lesiones dérmicas de una antigua
irradiación. Es fundamental inspeccionar el cuello en busca de un bocio, que
puede hacerse más visible cuando el paciente habla o hiperextiende el cuello. (Castro, s.f.)
En el síndrome de Cushing, la
inspección de la región cervical posterior puede demostrar la presencia de la
llamada giba de búfalo, que consiste en un cúmulo de tejido adiposo en
la zona de unión cervicodorsal. (Castro, s.f.)
Palpación
No debe omitirse nunca puesto que es
la maniobra que aporta más información. Se realiza detrás o delante del
paciente, con los pulpejos de ambos pulgares. (Castro, s.f.)
Si existe un bocio, la palpación
deberá precisar su tamaño, consistencia, simetría o asimetría y la presencia o
ausencia de nódulos. (Castro, s.f.)
La palpación del tiroides no
presupone, en todos los casos, la existencia de una patología de la glándula,
puesto que un tiroides normal puede ser palpable en un sujeto delgado. (Castro, s.f.)
En los bocios de gran tamaño, con
progresión intratorácica, es muy importante precisar si existen signos de
compresión venosa como la estasis yugular, la cual puede ponerse de manifiesto
al elevar el paciente los brazos con la cabeza inclinada hacia atrás (signo de
Marañón). (Castro, s.f.)
La consistencia del tejido tiroideo
palpado debe reseñarse siempre, aunque sea un dato muy subjetivo. En la tabla 2
se clasifican las distintas consistencias del tiroides. (Castro, s.f.)
La presencia de dolor a la palpación
es un hallazgo infrecuente y que nos orienta hacia una tiroiditis subaguda De
Quervain o hacia la presencia de una hemorragia intraquística. (Castro, s.f.)
En la enfermedad de Graves-Basedow
puede apreciarse un frémito, debido a la compresión arterial de la abundante
vascularización por la gran masa tiroidea. (Castro, s.f.)
La palpación de la región laterocervical
permitirá descubrir frecuentemente la presencia de adenopatías, sospechosa,
entre otras patologías, de una metástasis de un carcinoma papilar de tiroides. (Castro, s.f.)
Sistema Nervioso
En Endocrinología, la exploración del sistema
nervioso es de gran utilidad para demostrar la presencia de alteraciones
neurológicas y en especial neuropatías, tan frecuentes en la diabetes. (Castro, s.f.)
Debemos, en primer lugar, explorar
los pares craneales. La neuropatía diabética clásica se manifiesta como una
polineuritis simétrica de extremidades inferiores y que en la exploración
física se detecta por una abolición temprana de los reflejos aquíleos y una
pérdida o disminución importante de la sensibilidad profunda. También, en esta
patología endocrina, pueden existir mononeuritis del III, IV y VI par craneal. (Castro, s.f.)
En el hipotiroidismo es
característica la hiporreflexia, en especial el enlentecimiento de la fase de
relajación de los reflejos osteotendinosos. (Castro, s.f.)
Por el contrario, en el
hipertiroidismo es característica la exaltación de los reflejos
osteotendinosos, que se hacen vivos y rápidos. También existe hiperreflexia en
el hipoparatiroidismo, dando lugar a dos signos clásicos: (Castro, s.f.)
Signo de Chvosteck. Consiste en la contractura del orbicular del labio superior al
percutir con el martillo de reflejos las partes blandas de la mejilla por
debajo del arco cigomético, con la consiguiente desviación del labio superior. (Castro, s.f.)
Signo de Lust. Consiste en la aparición de flexión dorsal del pie al percutir el
cuello del peroné. Este signo debe buscarse especialmente en el lactante. (Castro, s.f.)
Región Torácica
Tanto a la inspección como a la
palpación, la exploración somera del tórax puede ofrecer algún signo de
evidencia de enfermedad endocrinológica. (Castro, s.f.)
Al exprimir manualmente el pezón podemos
demostrar la existencia de galactorrea, que nos hará sospechar la existencia de
un adenoma prolactínico. (Castro, s.f.)
Por otro lado, en el síndrome de
Cushing observamos la giba de búfalo, la obesidad faciotroncular y las estrías
rojovinosas. Estas últimas podemos apreciarlas tanto en la raíz de los brazos
como en la Región Abdominal. (Castro, s.f.)
Extremidades
Mediante la inspección podemos
descartar el aspecto tosco y la desproporción del tamaño de los pies y manos en
el caso de la acromegalia. (Castro, s.f.)
En el hipertiroidismo podemos
descubrir un temblor fino de las manos al extender forzadamente los brazos
hacia adelante y con los dedos abiertos. Así mismo, es también característico
del hipertiroidismo de Basedow el mixedema pretibial, que consiste en una
induración violácea de la piel en la región pretibial y que es de causa
autoinmune. (Castro, s.f.)
En la miopatía hipotiroidea podemos
encontrar una hipertrofia de la masa gemelar. Para explorar la alteración
miopática de la fuerza de la cintura pelviana y extremidades inferiores
utilizamos la maniobra del taburete, que consiste en demostrar, en los casos de
miopatía, la incapacidad del paciente para levantarse de aquél sin ayuda. (Castro, s.f.)
En el hipertiroidismo,
hipotiroidismo, hipercorticismo e hiperparatiroidismo, puede apreciarse
mediante la exploración de la fuerza o el tono muscular, un déficit en la
fuerza o en el tono muscular sugestivos de miopatía. (Castro, s.f.)
Aparato Genital
La exploración de los genitales
externos es de suma importancia en Endocrinología, especialmente en las
alteraciones del eje hipotálamo-hipófiso-gonadal. (Castro, s.f.)
Unos genitales externos ambiguos,
tanto en el hombre como en la mujer, y en especial en la edad infantil, deben
hacernos pensar en un seudohermafroditismo. La presencia en la mujer de un
clítoris aumentado de tamaño representa un signo importante de virilización. (Castro, s.f.)
La palpación testicular es
fundamental para diagnosticar los hipogonadismos y la criptorquidia. Debemos
efectuarla con las manos calientes para evitar el reflejo cremasteriano y con
el paciente en decúbito supino o en cuclillas. Con la mano izquierda palpamos el
canal, mientras que con la derecha exploramos el escroto y el orificio externo
del canal inguinal. (Castro, s.f.)
El hallazgo de un escroto vacío
sugiere una anorquia (falta de testículos) o una criptorquidea (falta del descenso
testicular). En los casos de hipogonadismo hipogonadotrófico palparemos unos
testículos pequeños y de consistencia blanda, como si se tratasen de testículos
prepuberales. Por el contrario, en el síndrome de Klinefelter, que es un
hipogonadismo hipergonadotrófico, es característico el hallazgo de unos
testículos pequeños y de consistencia dura. (Castro, s.f.)
En el niño, un pene pequeño nos
orientará hacia cualquiera de los tipos de hipogonadismo, pero sin confundirlo
con un pene enterrado, situación muy frecuente en niños obesos en los que
siendo el pene de tamaño normal se oculta en la grasa púbica, lo que da una
apariencia de pene pequeño sin serlo realmente. (Castro, s.f.)
Por el contrario, un pene aumentado
de tamaño en el niño es sugestivo de pubertad precoz o seudopubertad precoz. Si
se trata del primer caso, los testículos estarán también aumentados de tamaño y
de consistencia, por encima de lo que cabría esperar para la edad cronológica
del individuo, pero en concordancia con el tamaño del pene. Por el contrario,
en la seudopubertad precoz, generalmente los testículos son de tamaño y
consistencia concordantes con la edad cronológica del niño, es decir,
prepuberales (Castro, s.f.)
Valoración diagnostica
Se recurre a
diversos estudios diagnósticos para valorar el sistema endocrino. Las pruebas
más frecuentes se revisan en esta sección.
Se utilizan
pruebas para determinar los valores hormonales en sangre. El conocimiento de
las cifras séricas de una hormona específica puede proveer información acerca
de la hipofunción o hiperfunción del sistema endocrino, y el sitio de la
disfunción. Se usan otras pruebas sanguíneas para detectar autoanticuerpos o
valorar el efecto de la hormona sobre otras sustancias (ejemplo el efecto de la
insulina sobre las concentraciones de la glucosa sanguínea). (Suddarth's
& Brunner, 2013, pág. 1249)
Se pueden aplicar
pruebas d orina para determinar la cantidad de hormonas o sus productos
terminales excretados por los riñones. Se obtiene especímenes en momentos
preciso o en algunos trastornos se colectan durante 24h para cuantificar
hormonas o sus metabolitos. (Suddarth's & Brunner, 2013,
pág. 1249)
La prueba de
estimulación permiten determinare la forma en que responde una glándula
endocrina a la administración de hormonas estimulantes, que en condiciones
normales se producen o se secretan por
el hipotálamo o la glándula hipófisis. (Suddarth's & Brunner, 2013,
pág. 1249)
Se pueden utilizar
pruebas de supresión para determinar si están íntegros los mecanismos de
retroalimentación negativa que controlan la secreción de hormonas por el
hipotálamo o la hipófisis. (Suddarth's & Brunner, 2013,
pág. 1249)
Los estudios de
imagen incluyen los radioactivos, las imágenes por resonancia magnética (IRM),
la tomografía computarizada (TC), la ultrasonografía, la tomografía por emisión
de positrones y la radioabsorciometria de doble energía. Las pruebas genéticas
de detención se emplean para determinar la presencia de una mutación genética
que puede predisponer a un individuo a cierto trastorno. (Suddarth's
& Brunner, 2013, pág. 1249)
Pruebas diagnósticas más
frecuentes en la alteración endocrina:
- Analítica de sangre y orina
- Electrolitos: Na, K, Ca, P.
- Glucosa.
- Niveles plasmáticos de hormonas:
- Hormona tiroidea.
- Catecolaminas.
- Hormonas suprarrenales.
- Hormonas pancreáticas.
- Pruebas dinámicas que evalúan la capacidad de una glándula para responder cuando se la estimula o inhibe:
- Se introduce una sustancia (estimulante o depresora) y se toman muestras de sangre y orina, siguiendo unos protocolos preestablecidos.
- Pruebas radiológicas:
- Rx de cráneo y esqueleto.
- Resonancia magnética.
- Densitometrias.
- Ecografías.
- Gammagrafías. (15ju)
Bibliografía
(s.f.). Recuperado el 18 de julio de 2015, de
https://www.google.com.ec/url?sa=t&rct=j&q=&esrc=s&source=web&cd=2&cad=rja&uact=8&ved=0CB8QFjABahUKEwi7vrPPsebGAhVFbxQKHUPbAAw&url=http%3A%2F%2Fwww.laenfermeria.es%2Fapuntes%2Fotros%2Fmedico_quirurgica%2Fsistema_endocrino.doc&ei=lyurVfuWMMXeUcO2g2A&usg=AF
C. Guillamas, E. G. (s.f.). Tecnicas
Basicas de Enfermeria. Editex.
Castro, J. V. (s.f.). ELSEVIER.
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http://www.elsevier.es/es-revista-semergen-medicina-familia-40-articulo-exploracion-del-sistema-endocrino-atencion-13063159
Suddarth's, & Brunner. (2013). Brunner
y Suddarth Medico Quirurgico 1 (12 ed., Vol. II).
Villaquiran, M. C. (2008). Anatomia
Humana, Fisiologia e Higiene. Guayaquil: Panorama.
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